Los amantes del café están acostumbrados a consumir café sólo y sin azúcar, pero existen múltiples formas de tomarlo que además aportan un complejo de beneficios curiosos de conocer. ¿Cómo podemos también tomar café?
Café con mantequilla: Forma parte de la dieta conocida como “a prueba de balas”. Este tipo de café ha sido difundido por Dave Asprey, un inversor en tecnológica que ha dedicado parte de su vida y de su dinero en manipular su organismo para aumentar su cociente intelectual, perder kilos, rejuvenecerse y dormir mejor. Y es así como ha creado el café con mantequilla, ya que, afirma que gran parte de las calorías que deberíamos de ingerir son grasas saludables al observar un día a unos monjes tibetanos, como mezclaban en su té mantequilla observando un fortalecimiento corporal al tomarlo durante varios días. Y es así como decidió difundir el café con mantequilla, un café “limpio”, ya que esta bebida tiene partículas antioxidantes.
¿Cómo lo preparamos? Algo tan fácil como, batir en un vaso un café largo recién hecho y una cucharada de mantequilla. Conseguirás así obtener un café cremoso con una capa espesa de espuma.
Café con aceite de coco: Consumir aceite de coco diariamente es beneficioso para nuestra salud ya que esta puede ofrecer desde la pérdida de peso hasta el reforzamiento de nuestro sistema inmunológico. Posee una combinación de ácidos grasos que dan propiedades medicinales potentes, acelera el metabolismo, mata bacterias, virus y hongos ayudando así a prevenir infecciones entre muchas otras propiedades. Por ello, ¿qué mejor que consumir nuestro café diario con aceite de coco? Sólo tendrás que añadir una cuchara de aceite de coco a tu café. Éste no perderá ninguna propiedad ya que, no pierde beneficios ni con el frío ni con el calor, así que será perfecto si lo añades a tu bebida caliente preferida.
Café con canela: Cuando pensamos en canela, se nos va a la mente a aquella especia marrón que nos endulza las comidas pero, a pesar de eso, posee beneficios para la salud y el bienestar. Tiene propiedades antibacterianas que hacen ser un potente limpiador, ayuda en los resfriados, controla el azúcar en sangre, combate el acné, entre otros. Pero además, es una buena compañera en nuestro café de todas las mañanas. Si no deseas polvorearlo encima del café hecho ya que cueste más diluirla, siempre podrás mezclarlo con el café molido antes de prepararlo así pasará por la fase de filtro y obtendrás mejores resultados.
